THE GHOST WRITER
Guión: Robert Harris, Roman Polanski
Director: Roman Polanski
Año 2010
Valoración:9,2/10
FICHA IMDB: |
Si una película de Polanski no es inquietante, no es una película de Polanski. Si después de cada "crescendo" (al estilo Kubrick) no se guarda una parada para que el espectador piense y medite sobre lo que ve, habrá perdido su genio. Las películas de este director siempre dejan un poso de duda: hay maldad soterrada y expresa en ocasiones, sobreentendidos, pocos personajes que resultan ser lo que parecen, y una absoluta carencia de héroes. Esa es su primera venganza contra Estados Unidos.
Porque metido a director de películas ambientadas en el mundo de la política internacional,no podríamos esperar otra cosa que su habitual juguetonería y maneras perversas de recordar cómo es el mundo en que vivimos.
La película tiene una magnífica obertura, con un transbordador llegando a puerto y un coche que no avanza hacia éste cuando llega, seguido de la imagen de un cadáver en la playa. A partir de ahí, cuando al escritor representado por Ewan Mc Gregor se le propone hacer de negro de las memorias de un ex-premier británico, ya sospechamos que ha caído en una tela de araña que le va a ir atrapando. El cadáver es el de su antecesor en el cargo, y al aceptar el contrato viaja a una lejana isla en la que está la residencia del ex-presidente. Rodeado de inmensas reglas de seguridad recibe un legajo, que recibe como hacía Joe Gillis (Willliam Holden) el horrible guión de Norma Desmond en Sunset Boulevard.
No es ningún misterio cuanto recuerda el ex-premier representado por Pierce Brosnan es un trasunto de Tony Blair. Estúpido, engreído y absolutamente inútil, aunque muy manejable es como se nos presenta el personaje. Porque Polanski no pierde ocasión de recordarnos que Gran Bretaña no hace más que impedir la formación de una unión europea y funciona como un topo de EEUU en Europa. Y todas sus decisiones se toman lejos de Londres, a un atlántico de distancia. Nos va a recordad que el CPI no está ratificado por USA, que secuestra libremente en europa, y que hace su santa voluntad en el mundo. Y la razón de que todo aparezca es la inmersión en la investigación del "negro".
Una vez uno termina de ver esta película, le ocurre lo mismo que con "El Pianista" o "Frenético": necesita revisarla para intentar agarrarse a una razón de que este mundo siga funcionando. Las verdades de Polanski, además de tomarse su personal venganza contra USA, son más ciertas que cualquier sinceridad.